Habla Tuiavii, el jefe de una tribu de Samoa tras su viaje por Europa, 1914:
«También sienten pasión por algo que no podéis comprender,
pero que a pesar de esto existe: el tiempo.
Lo toman muy en serio
y cuentan toda clase de tonterías sobre él.
Aunque nunca habrá más tiempo entre el amanecer y el ocaso,
esto no es suficiente para ello.